Carlos Ramón Fernández es uno de los artistas más queridos en Olavarría. Así lo refleja la convocatoria que no deja butaca disponible cada vez que el cantor se presenta en alguno de los escenarios de la ciudad. Ha pasado por el Teatro, salones de clubes, pero está claro que su casa es el Festival de Doma y Folclore de Olavarría. Hace varios años que es un número fijo en la grilla de la programación. Allí se produce una comunión con su público que sabe que una vez al año esperará al cantor de pie y con aplausos cerrados, para que él suba al escenario “Horacio Guarany” con la guitarra en alto para regalarles un puñado de canciones. No se ha producido una presentación suya en la que no se retire ovacionado.
Este año será la antesala de “Los Tekis” en la jornada de cierre del festival que será el 5 de marzo.
Ayer estuvo presente en la presentación formal del evento en el Centro Cultural San José. Allí acompañó al productor Ricardo Sosa, al intendente Ezequiel Galli, al Secretario de Desarrollo Humano y Calidad de Vida Diego Robbiani, al presidente del club Ferrocarril Sud Roberto Vidal, en la mesa donde se contaron las novedades y expectativas para la 19° edición de la fiesta que tendrá lugar del 3 al 5 de marzo en el predio de la rural.
Carlos Ramón Fernández comenzó agradeciendo a la familia Sosa (responsables del festival) y a todas las personas que trabajan para el evento. Destacó que el festival se renueva al igual que la ciudad y confesó que aquí lo pasa “fantástico”. Acto seguido afirmó “yo creo que éste festival nació grande y es muy raro porque un festival empieza de a poquito. Y creo que este año va haber muchísima gente, más que en otras ediciones”.
“Quiero agradecer porque no todas son rosas en la vida de un cantor. Lo ven arriba del escenario y por ahí se lo aplaude bastante, pero después tiene una vida como cualquier otro, vive solo en la casa. Así que siempre preciso el cariño de la gente. En Olavarría me lo dan cada año”, concluyó.