En la pasada sesión ordinaria, el Concejo Deliberante sancionó la Ordenanza que crea un registro de espacios culturales no estatales para el fomento de sus actividades, de acuerdo a una iniciativa del Presidente del Honorable Concejo Deliberante, Eduardo Rodríguez.
La propuesta fue impulsada por la creciente necesidad de brindar un marco normativo para el apoyo a los Espacios Culturales no Estatales que funcionan en el Partido de Olavarría.
La Ordenanza Nº 3822 detalla en su artículo primero la creación del registro deespacios culturales no estatales en el partido de Olavarría. Posteriormente describe que serán considerados espacios culturales no estatales a los espacios donde se realicen actividades culturales, artísticas y de educación no formal, de manera sistemática y como principal objetivo, administrados por entidades de bien público y que cumplan con los requisitos legales pertinentes para su funcionamiento. En el tercer punto del articulado establece que el registro de espacios culturales no estatales funcionará en la órbita de la Subsecretaría de Cultura, Educación y Turismo y los interesados en inscribirse deberán presentar los siguientes requisitos: ser Asociación sin fines de lucro con Personería Jurídica; Entidad de Bien Público declarada por la Municipalidad; poseer habilitación Municipal para su funcionamiento y acreditar propiedad, locación, comodato, tenencia de hecho y / o cualquier otra forma legal de ejercicio de la administración del espacio cultural no estatal.
En su siguiente apartado completa: “La Subsecretaría de Cultura, Educación y Turismo inscribirá a los espacios culturales noestatales, previa verificación de haber cumplimentado los requisitos establecidos en los artículos 2º y 3º de la presente Ordenanza. La inscripción será gratuita, anual y se renovará en forma automática, previa acreditación del cumplimiento de las condiciones exigidas en la presente Ordenanza”.
En otro artículo de la Ordenanza se establece que “los espacios culturales no estatales inscriptos en el Registro podrán tramitar la exención Municipal del pago de la Tasa por Servicios Generales, el pago de la Tasa por espectáculo y el pago de los derechos de construcción, cuando se trate de edificaciones destinadas a albergar actividades vinculadas a la actividad cultural, artística y/o de educación no formal.
Finalmente, en su sexto artículo concluye que el Departamento Ejecutivo, a través de la Subsecretaría de Cultura, Educación y Turismo, podrá evaluar propuestas y brindar apoyo para la realización de actividades como así también colaborar en la promoción y difusión de la agenda de actividades de los mencionados espacios.
Eduardo Rodríguez manifestó que “la Cultura es responsabilidad de todos y que las políticas públicas de Cultura deben comprender y apoyar las actividades de promoción e inclusión cultural que realizan entidades y organizaciones de la sociedad”.
Asimismo, destacó que “si bien el Estado tiene un rol indelegable en el desarrollo de políticas de Cultura para cumplir con los derechos culturales de los ciudadanos y en Olavarría así se hace desde la gestión del Intendente Eseverri, los Espacios Culturales no Estatales cumplen una importante labor de manera autogestionada, ya que se trata de espacios de gestión cultural inclusiva que permiten desarrollar las potencialidades de quienes participan ayudando a forjar nuevos artistas, con llegada a los diferentes barrios de nuestra comunidad.”
El presidente del Concejo Deliberante señaló que “estos espacios son fuente de generación de propuestas abiertas a toda la comunidad de música, teatro, danza, cine, actividades literarias, plásticas, fotográficas, charlas, siendo lugares de encuentro entre los artistas y el público. Los vecinos de la comunidad asisten y participan cotidianamente en éstosespacios desde la práctica de alguna disciplina artística o desde la contemplación de las actividades que se suceden con regularidad, sosteniendo así cotidianamente una función social y comunitaria concreta.”
Por último definió que el presente marco normativo facilitará y promoverá el trabajo en red de los Espacios Culturales, preservando así mismo la independencia de cada una de ellos, revalorizando lo cultural como política de inclusión social y poniendo así de manifiesto un concepto de cultura que entiende a ésta como los hábitos, costumbres y modo de vida de toda una comunidad.