Dijo Marcelo Merlos, integrante del grupo Instrumental Huella Pampa, al término del show de despedida que dieron en el cierre de la Expo, el lunes por la tarde en el predio de la Sociedad Rural. La Expo Olavarría 2013 culminó con la presentación del “Chacarero cantor”, Carlos Ramón Fernández.
El músico expresó en diálogo con Planeta Cultural, algunas sensaciones del primero de los tres conciertos que marcarán la despedida del grupo emblema de los olavarrienses, que fundaron los hermanos Néstor y Daniel Godoy, hace 40 años.
Marcelo Merlos señaló, “fue un recital muy emotivo, nosotros más allá de todo tenemos una decisión tomada desde hace un par de meses, y es como que se nos acaba el tiempo, hoy una puerta, mañana otra y ya está. Entonces son emociones desencontradas totalmente. Querés darle lo mejor a tu gente, esa que durante años te vio en los escenarios… éste grupo tiene 40 años de trayectoria. Yo llevo veintiseis, desde muy chiquito ya estaba ahí arriba. Y realmente son cosas bravas que pasan por dentro.
El respeto, el silencio de la gente, es algo inexplicable. Son cosas que te llenan el alma. Estas ahí y la gente te escucha, te mira, te dice no se vayan, te aplauden y te piden otra y agradecen y vienen y te saludan. Y son distintas generaciones, un público que se ha ido renovando en el tiempo.
Por eso hemos querido ensamblar música un poco más moderna, porque el folclore ha cambiado, la demanda es esa. Anteriormente hacíamos un folclore un poco más barroco, con música clásica, que estaba muy bueno, pero las épocas fueron pasando. Hoy hemos tomado una decisión sabia, llegamos hasta acá, más no podemos por nuestras obligaciones. Éste un grupo donde hay que gestionar. Creemos que es momento de darle lugar a otra cosa, a otros artistas.
La pérdida de Daniel fue algo que nos costó…”
Al respecto recordó, “estuvimos dos años para hacer el disco, cada uno trabajaba física y emocionalmente. Pero fue bárbaro hacer ese material en ese estudio enorme, un lugar que tiene todo lo que un artista sueña.
En lo personal, la música me ha dado todo, el grupo me dio los viajes a Europa, a Estados Unidos, vivir y ser un artista afuera, porque acá nos conocemos todos, esas son emociones bárbaras. No se puede pedir más, es como que la meta está cumplida.
Ya estamos pensando en los dos conciertos finales, el del Festival de Doma y Folclore y por supuesto el del próximo 26 de diciembre en el Teatro. Ese concierto tendrá múltiples emociones.Queremos que nos acompañen todos, habrá sorpresas, varios artistas invitados.
Y lo más importante será tener la tranquilidad para poder hacer las cosas bien y que la emoción no te carcoma lo musical, o lo técnico.
Hoy dijimos nos bajamos, y no se lo que puede pasar dentro de un año. Hay que vivirlo, concluyó.