Este sábado se realizó la inauguración de la muestra sobre Alberto Olmedo. Unas 400 piezas, entre vestuario, afiches de sus películas, fotografías y demás artículos personales del capocómico. Por tal motivo Mariano Olmedo, uno de sus hijos estuvo en Olavarría y en diálogo con los medios recordó anécdotas y pasajes de la vida del “negro”.

Al comenzar la charla valoró la importancia de la exposición que homenajea a su padre desde lo personal y también en la repercusión de los seguidores del “Ídolo Popular”.

“Cada vez que armamos la muestra estamos en contacto con la gente”, señaló

Esta muestra, “nos llena de orgullo a mí y a mi familia. Y también a todos los que la hacemos, y nos gusta hacerla porque siempre tenemos una repercusión del público favorable”.

Esta muestra “no es solo la vida de Alberto Olmedo sino como él encaró su vida laboral desde muy chico.Salió de la humildad y a través del trabajo y el esfuerzo llegó a donde llegó. Ser un ídolo popular”, resaltó.

A su vez manifestó que la trascendencia de Alberto Olmedo generó el hecho de tener perdidos para llevarla fuera de la Argentina, “porque a través de sus películas, que fueron más de 38 llegó a latinoamérica”.

Por tal motivo hay “gente de Uruguay y de Perú que nos piden la muestra para llevarla y es algo que estamos tratando de organizar”, sintetizó.

Mariano Olmedo también se dió un tiempo para rescatar algunas de las miles de anécdotas que atesora del capocómico en su espacio personal y más allá de sus películas.

“En el año 83 estudiaba cine en Barcelona me viene a visitar después de casi un año, nos vamos a unas playas cerca de Marbella. Allí tenemos de vecino a Sean Connery el agente 007 con el cual terminan haciendo una amistad”. Fue el hecho que “desde no hablar el idioma pero sí desde la actuación entre dos artistas se fusionaron y pasamos unos días muy agradables. incluso con el tiempo pude trabajar con Connery cuando vino a filmar a la argentina”.

Los autos: “Era de regalarnos autos raros que no andaban y arreglarlos”

“Una vez se compró un auto que no andaba y se lo llevó empujando desde la agencia porque le gustaba de chapa y pintura. Era de regalarnos autos raros que no andaban y arreglarlos.

“Era amigo de sus amigos”
“Era muy amigo de sus amigos y lo demostraba con su grupo de trabajo, en el cine en un set de filmación, en el baúl del auto siempre llevaba vinos para el equipo técnico. Él empezó como técnico entonces le costaba despegarse de esa unión entre el técnico de televisión y el actor siempre lo llevo fusionado. El sabía donde poner una cámara donde iba la luz como iba a resultar mejor eso lo favoreció mucho”
Por último el hijo del capocómico se refirió al legado que le dejó en el aspecto personal.

“Cuando fallece tenía 22 años y en ese tiempo nos inculcaba a mis hermanos y a mí, el trabajo, la responsabilidad, el deporte. Hacíamos mucho deporte junto para distracción de él”
En realidad. “mi trabajo se lo debo a él y a mi mamá entre los dos nos hicieron una formación académica sobre como encarar la vida en los medios”.