Este domingo 11 de marzo se cumple un año del trágico recital del Indio Solari en Olavarría,al que asistieron miles de fanáticos de Argentina y también de paises vecinos y en el cual perdieron la vida dos personas.Reviví las imágenes de la previa al show.
Hoy es 11 de marzo y no es un día cualquiera en la historia de Olavarría. Se cumple un año del show del Indio Solari y Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado en el Predio La Colmena, donde perdieron la vida dos personas. Un recital que tuvo una previa increíble, donde todo fue fiesta, y al que asistieron en peregrinación por las calles y avenidas de la ciudad miles de personas.
Ese 11 de marzo cerca del mediodía lloviznaba en la ciudad, y es un detalle más para la anécdota. Era prácticamente imposible transitar por las calles, centenares de colectivos y autos ingresaban a la ciudad y en las esquinas los asados improvisados, con banderas y cánticos eran la postal.
En los parques y hasta en los barrios en los cuales se había anunciado (en la conferencia de prensa de productores y autoridades) que no habría gente vinculada al show había fanáticos y vecinos que improvisaban puestos de venta.
A esas alturas todo era alegría y los olavarrienses éramos la sede del “pogo más grande del mundo” que se iba a desarrollar en La Colmena.
Por la tarde, la imagen seguía siendo de felicidad, pero con la sensación de que jamás habíamos visto tanta gente junta. En manada o mejor dicho en procesión caminaban por lo ancho de la calle, desde la ruta 226 donde habían quedado varados los micros que los transportaban y que no podían ingresar porque no había lugar. Eso ya marcaba una inquietud. Gente que tenía que caminar hasta el predio, sin baños públicos en el camino, ni provisión de agua. Además no sabían como llegar porque no había indicaciones y les habían vendido las entradas diciendo que se quedaban a dos cuadras del predio y preguntaban a los que íbamos a registrar ese momento histórico para la ciudad.
La peregrinación fue larga hasta llegar al predio, pero no se sintió porque todo era felicidad y todos cantaban las canciones del Indio y obvio los clásicos de Los Redondos. Llegar a La Colmena fue complejo en el atardecer, el barrio lindero estaba vallado y no había quien diera indicaciones de cómo llegar. Luego de una vuelta, ya está el predio y las boleterías y los accesos estaban ahí. En el ingreso las personas de seguridad con sus chalecos correspondientes no hicieron como en otros recitales donde te piden que accedas con la entrada en alto en la mano. Al contrario, “no se empujen que van a entrar todos”, fue lo que dijo el seguridad al ver la peregrinación que llegaba y obviamente como ya se sabe no pidió ningún ticket, ni hubo algún tipo de cacheo.
El megashow que se había planteado como la revancha a la prohibición de tocar impuesta a Los Redondos veinte años atrás transitó como ya se sabe, con un clima extraño, (muchos se enteraron de lo sucedido posteriormente) aunque para cada asistente la sensación fue distinta. Sólo que todos coinciden que hubo una gran desorganización.
La sensación, tristeza infinita; dos personas perdieron la vida, hubo varios heridos, destrozos y saqueos. Y como si fuera poco varias personas perdidas, sí…esa misma noche y el domingo por la mañana centenares de micros se fueron sin completar sus asientos porque muchos no alcanzaron a llegar producto de la tumultuosa salida del predio, todos por un único lugar, en medio de una avenida que estaba repleta de puestos, que sirvieron a la previa, pero que ahora había que sortear, además el barrio lindero vallado lo que hizo que muchos dieran vueltas sin poder acceder a un egreso claro.
Al día siguiente hubo disturbios en la Terminal y una de las imágenes que jamás olvidaremos, las personas trasladadas hasta la ruta en la caja de uno de los camiones de la Municipalidad.
Esa misma jornada también ocurría la conferencia en cadena nacional del intendente Ezequiel Gallí, donde entre otras cosas decía, “La situación se fue de las manos, no se esperaba tanta gente”.
Los días posteriores fueron de tristeza y solidaridad para que todos los que estaban varados llegaran a casa. Se armaron grupos de facebook y varias cadenas por redes sociales que muchos compartieron hasta que el último llegó a su lugar de origen.
En el medio de todo esto, un capítulo aparte para los medios nacionales, montaron el show de la desinformación hasta en el número de personas fallecidas, montaron un escenario donde la indignación funcionó como eje y la demonización como complemento.
En la causa judicial que se sigue, están imputados de Estrago con dolo eventual agravado por haber causado la muerte de dos personas y por haber puesto en peligro de muerte a otra o alternativamente Estrago culposo agravado por haber causado la muerte de dos personas y por haber puesto en peligro de muerte a otra en concurso ideal homicidio culposo, los hermanos Peuscovich y Gustavo Zurita.
Fotos Archivo/Axel Sayago y Jorgelina Perez para Planeta Cultural y aporte de lectores.